Panorámica de Cibeles hoy a las 6 de la tarde.

El movimiento sigue vivo : cualquiera que haya estado -o aún este- hoy en el centro de Madrid estará de acuerdo. La manifestación a nivel global de los indignados, 15O, está teniendo una especial acogida en la capital, donde varias marchas que venían de diversos puntos de la ciudad han convergido en Cibeles, para después dirigirse en conjunto por la calle Alcalá hasta abarrotar Sol , el indiscutible centro neurálgico del 15M.

Las apenas dos horas y media que he podido estar allí metido -de 6 a 8:30 de la tarde- me han sobrado para llegar a la conclusión de que todo sigue intacto: los mismos lemas, la misma diversidad, la misma libertad y originalidad de siempre; el mismo espíritu . He visto coros de divertidas coplillas, una performance del Señor Capital que tiene sujeto por el cuello a la Justicia y a la Democracia...: cada cual ofrece su interpretación de esta profunda crisis, y lo hace a su manera, como siempre.

Calle Alcalá a las 8 de la tarde.

Ver esto emociona. Uno olvida lo que siente al ver banderas de otro tiempo que por suerte poco pega con este, cuando escucha un "el pueblo, unido, jamás será vencido" que hace retumbar la calle Alcalá. También cuando ve multitudes hasta donde no alcanza la vista, o a personas de todas las edades con las mismas motivaciones, como ancianos gritando -o trepando, true story - como quinceañeros.

Mucha, mucha gente. Ahí siguen miles en la ahora intransitable Sol. Así pues, buenas noticias para los que pensábamos que el 15M se había desinflado: sigue tan fuerte como siempre .