Algunos médicos dicen que sí - en particular las formas leves y situacionales de la dolencia. Pero otros advierten que no recomendaría tratar formas más graves de la depresión exclusivamente con aceites esenciales, que se encuentran en lavanda, bergamota, manzanilla y ylang ylang. "No es una cura para todos. Los aceites esenciales pueden ayudar, pero depender de ellos para curar solo la depresión es algo ridículo ", dice Mark Sherwood, un médico naturopático que dirige el Instituto Médico Funcional en Tulsa, Oklahoma, con su esposa, la Dra. Michele Neil-Sherwood .

Los aceites esenciales son completamente naturales - son extractos concentrados eliminados de las semillas, hojas, flores y raíces de las plantas. Cada planta tiene su propio conjunto de ingredientes activos y se utiliza para diferentes fines terapéuticos; Los especialistas integrales de la salud los utilizan para ayudar a la gente con una gama de condiciones, incluyendo ansiedad, insomnio, estreñimiento y dolor.

Un químico francés, René-Maurice Gattefosse, se enteró de las propiedades curativas de la lavanda alrededor de 1910. Después de quemarse la mano durante un experimento, Gattefosse enjuagó con lavanda. Su mano comenzó a sanar al día siguiente. El químico llevó a cabo posteriormente experimentos sobre las propiedades curativas de la lavanda con soldados heridos durante la Primera Guerra Mundial.

La aromaterapia, también conocida como terapia de aceite esencial, implica el arte y la ciencia de usar esencias aromáticas extraídas naturalmente de las plantas para equilibrar, armonizar y promover la salud del cuerpo, la mente y el espíritu, según la Asociación Nacional de Aromaterapia Holística. El enfoque busca combinar los procesos fisiológicos, psicológicos y espirituales para mejorar el proceso innato de curación de una persona. Aromaterapia puede implicar el uso de difusores, que son similares a los vaporizadores, así como velas y lociones. También están disponibles las cápsulas de lavanda, bergamota y manzanilla. Los aromaterapeutas, masajistas y farmacéuticos pueden aplicar aceites esenciales al cuerpo o realizar sesiones de aromaterapia en las que el paciente inhala la sustancia.