¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Brujum escriba una noticia?
El cobre es un oligoelemento esencial que está presente en todos los tejidos del cuerpo. Se necesita una pequeña cantidad para que el cuerpo funcione, pero el cuerpo no puede producir su propio cobre. Debe obtenerlo de la comida
El cobre es un oligoelemento esencial que está presente en todos los tejidos del cuerpo. Se necesita una pequeña cantidad para que el cuerpo funcione, pero el cuerpo no puede producir su propio cobre. Debe obtenerlo de la comida.
El cobre trabaja con el hierro para ayudarle al cuerpo a la formación de los glóbulos rojos. También ayuda a mantener saludables los vasos sanguíneos, los nervios, el sistema inmunitario y los huesos. El cobre también ayuda a la absorción del hierro.
Las ostras y otros mariscos, los granos enteros, las legumbres, las nueces, las papas (patatas) y las vísceras (riñones, hígado) son buenas fuentes de cobre en la dieta, al igual que las verduras de hoja oscura, las frutas deshidratadas como ciruelas, el cacao, la pimienta negra y la levadura.
Los Alimentos con una mayor concentración de cobre son las frutas y verduras, los cereales, las legumbres, las carnes rojas, los frutos secos, el pescado y el marisco, según explican los expertos del Instituto Europeo del Cobre (European Copper Institute), quienes además revelan que está presente en ese capricho que nos permitimos para hacer más llevadera la "vuelta al trabajo": el chocolate negro.
Beneficios de incluir cobre en la dieta:
- La piel nos pide cobre, un oligoelemento imprescindible para la formación de la melanina, el pigmento que protege de las exposiciones solares
- Frena el colesterol malo. El cobre desempeña un papel relevante en la salud cardiovascular
- El cobre es necesario tanto para conseguir un buen tono y una buena función muscular, como para reducir la fatiga y el riesgo de lesiones
- Pone a tono el cerebro. El cobre favorece un buen funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso, así como la correcta conexión entre los nervios y las células nerviosas
Fuente: QueSalud