Para financiar la construcción del NAICM, o Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, se lanzó una oferta de bonos vendidos a inversionistas tanto nacionales como extranjeros, los cuales el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha ofrecido comprar con el objetivo de poder llevar a buen puerto su cancelación.
- Cancelación del proyecto: Después de cancelar el proyecto del NAICM, el gobierno de México corre el riesgo de caer en incumplimiento de contrato por lo que la recompra de bonos es clave para evitar caer en dicha irregularidad.
- Monto liberado: La secretaría de hacienda y crédito público liberó un total de 1, 800 millones de dólares con el objetivo de comprar un tercio, aproximadamente, de los bonos del aeropuerto logrando así poder modificar el contrato para así poder cancelar el aeropuerto sin ningún tipo de incumplimiento.
- Sustento de la compra: Para sustentar dicha compra el gobierno de México necesitará más que préstamos en línea inmediatos por lo que ha decidido usar el dinero recaudado por la tarifa de uso aeroportuario para pagar dicho monto aunque para que esto funcione se debe elevar la TUA y garantizar el flujo de pasajeros al actual aeropuerto.
- Confianza: El objetivo del gobierno de López Obrador es generar confianza en los inversionistas siendo el principal objetivo el de garantizar que los bonos no caigan en pérdida así como evitar la posibilidad de que las calificadoras crediticias evalúen mal a México así como los inversionistas vayan a tribunales.
- Riesgos inmersos: El panorama sigue siendo negro pues el NAICM está a la merced de los fondos buitres, léase lo que pasó en Argentina, el aumento de la TUA y el restringirse la construcción de un aeropuerto cercano como el de Toluca o Santa Lucía por lo que la recompra de bonos es parte crucial para que todo salga bien.
Esperemos ver en que desemboca todo este caos relacionado con la cancelación del Nuevo Aeropuerto..
Esperemos ver en que desemboca todo este caos relacionado con la cancelación del Nuevo Aeropuerto pues para muchos la mejor decisión hubiera sido continuar con su construcción pues si bien se requería más dinero los riesgos eran menos y no se necesitaba enfrascarse en una negociación con el objetivo de evitar llegar a tribunales.