Los encuentros mantenidos por el Santo Padre con el rey Abdalá II de Jordania, con Simón Peres, Presidente del Estado de Israel, o con el Primer Ministro Netanyahu o con el Jefe de la Autoridad Palestina, Abbas, tenían carácter meramente de cortesía. Sin embargo, el Obispo de Roma ha realizado aseveraciones tales como la necesidad de reconocer el derecho del pueblo palestino a la soberanía e independencia y a que pueda viajar libremente, manifestó su rechazo expreso al muro vergonzoso que separa Israel de Cisjordania, además también abogó por un Estado soberano israelí que tiene derecho a vivir en paz y ha condenado el holocausto nazi del pueblo judío. Hizo también llamamientos a la tolerancia entre los fieles de las distintas religiones que pueblan la zona, defendiendo el diálogo interreligioso y abogó por una solución negociada al conflicto de Oriente próximo.

El carácter de peregrinación del viaje de Benedicto XVI se abrió  visitando el Cenáculo y  ha concluido en el Santo Sepulcro. Ha celebrado santa misa en Ammán, con autoridades de la Iglesia ortodoxa, Belén, y la más multitudinaria , en la sede de La Sagrada Familia, Nazaret.

 Llegada del Santo Padre a Ammán.

 El Papa ante el Santo Sepulcro