El pasado viernes 4 de marzo el Coro de Cambra Amalthea actuó en la parroquia de Nuestra Señora de los ángeles en donde un extraordinario concierto fue celebrado en donde 8 piezas fueron interpretadas por el coro en donde hay que destacar las realizadas por Francisco Guerrero, Juan Bautista Comes y Gines Pérez.

El concierto que comenzó con un pieza muy alegre, dinámica y armónica de Gaspar Fernandez y titulada Pos con tanta graça nos mostró las diferentes tonalidades con las que se combinaba esta difícil pieza de interpretar. Voces al unisono que son respondidas y un dialogo espectacular, contundente y único hizo que esta primera pieza mostrase una armonía y melodía llena de gran belleza.

La segunda pieza fue Ave, Virgo Sanctisima de Francisco Guerrero en donde una pieza solmene con cánticos mas pausados y alargados comenzaban esta obra en donde de nuevo las diferentes tonalidades de voces y el sonido melódico formaban parte de esta nueva interpretación en donde no dejaba de mostrar una obra realmente extraordinaria que se combinaba y era mas relajada permitiendo disfrutar de un sonido único.

In memoria de Juan Bautista Comes destaca por unos cánticos de solemidad propios y acordes a el lugar de celebración en donde el carácter más religioso y su música pausada demostraban las excelentes voces de este coro de cámara que hacia disfrutar a todo un publico que llenaba el templo y aplaudía cada una de las obras realizadas.

O cruz de Gines Perez es la siguiente pieza en interpretarse que es una de las más destacadas de este concierto en donde las tonalidades bajas, suaves entremezcladas con la intensidad y el cambio de tonalidades nos permitían disfrutar de una pieza intensa que iba in crescendo para concluir con unos bajos excepcionales y muy pausados.

Si la mar era de leche de Davod Galvez fué la siguiente pieza en donde de nuevo los tonos más alargados y agudos mostraban la intensidad en la parte central de esta hermosa obra en donde del crescendo sonido va descendiendo hasta mostrar un sonido más agudo.

Eli, Eli es una de las piezas más peculiares en donde de nuevo el concierto recupera la armonía y melodía del principio con un cántico pausado . Intensidad, sonoridad, estribillo bello y se va combinando con subidas y bajadas de tonalidades.

Nobis Natus comenzó con un tono alegre, dinámico y en donde destaco por ser una pieza final que ponía el broche final con el mismo sonido del principio en donde la combinación de tonalidades y el excepcional sonido del coro hizo que todo el mundo disfrutase de un concierto breve, intensos y bello en la parroquia de Nuestra Señora de los Angeles del Cabañal de Valencia.