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No podía dejar pasar la moda de las modernas yogurterías, que están invadiendo centros comerciales y calles principales de toda España. La multinacional Danone ha puesto en marcha un nuevo área de negocio, pese a estar inmersa en pleno ajuste de plantilla en toda Europa. En España, en concreto, se producirán despidos en las cuatro divisiones de la compañía: lácteos, aguas, alimentación infantil y química, hasta alcanzar casi un centenar de trabajadores, e incluso va a desaparecer la planta de Sevilla.
Aún así, la reciente decisión de conceder las primeras franquicias de La Yoghourtería by Danone –proyecto que ha sido testado por la compañía desde 2010– ha despertado el interés del grupo a nivel global, por lo que se prevé una internacionalización inmediata del modelo de negocio en franquicia, que por el momento es ajeno a los recortes que está experimentando la marca.
‘La estrategia estaba decidida en noviembre, antes de los recortes, y ahora estamos probando hasta consolidar esta nueva área de negocio’, ha explicado a los medios de comunicación Ágata Gelaberto, directora de la unidad de negocio de ventas en Danone. Y es que, aunque la explotación en franquicia ha estado entre los objetivos desde los orígenes, Danone España asumió los riesgos de la fase de pruebas del proyecto para ofrecer una franquicia ‘con mayores garantías’, según Gelaberto.
Creada hace tres años, La Yoghourtería by Danone es una marca presente en toda España, con 19 establecimientos, en ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga o Palma de Mallorca. Ahora Danone busca una decena de franquiciados con la mejor disposición y con locales bien emplazados, con una superficie de entre 50 y 100 metros cuadrados, a ser posible con posibilidad de terraza, en zonas de elevado tránsito peatonal, bien sea en el centro de las ciudades o en zonas de alta afluencia turística.
‘En la actualidad estamos en fase de recibir y seleccionar a los candidatos’, ha explicado Ágata Gelaberto. Hay establecido un canon de entrada del franquiciado de 8.000 euros, además debe aportar el local y su remodelación. ‘Hablamos de una inversión de en torno a 100.000 euros’, estima la directiva de Danone, quien añade que que cada yogurtería puede generar unos tres empleos directos, además del posible autoempleo del franquiciado. ‘Como aún estamos recibiendo candidaturas no hemos seleccionado todavía las localizaciones, pero zonas como la Comunidad Valenciana, las Islas Baleares, la Comunidad Canaria o Andalucía son a priori las más atractivas para estos establecimientos’, comenta Ágata Gelaberto, ‘por sus características turísticas y su clima’.
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