El primer síntoma de que tu negocio de marketing multinivel no evoluciona como debiera y de que te estás precipitando hacia la desilusión y el abandono, es el desgaste emocional.

Empezaste tu negocio con gran ilusión. Habías estado en una reunión en un hotel acompañado por un conocido tuyo que te había hablado del marketing multinivel y de lo bien que le iba a él, aunque hacía muy poco tiempo que estaba en el negocio.

En aquella reunión todos los oradores que intervinieron, todos muy trajeados que parecían ir de uniforme, hablaron de su historia, eran de familia modesta, habían tenido que trabajar desde muy joven pero ahora gracias al marketing multinivel ganaban miles de euros a la semana. Eso sí, no te fijaste que el traje le quedaba grande, el cuello de la camisa estaba un poco raído y los zapatos necesitaban medias suelas.

Entre tantos aplausos y vítores creíste ver una oportunidad para ti, por lo que ese mismo día ya habías firmado para unirte a esa compañía.

Tu amigo, el que te había llevado a la reunión, te dijo que tenías que hacer para desarrollar tu negocio: “Simplemente vamos a hacer una lista de todos tus conocidos y vamos a empezar a llamarlos”.

Tú no estabas muy convencido. ¿Llamar a todos tus conocidos? ¿Incluso a los que hacía mucho que no veías? Y llamarlos ¿Para decirles, que? Simplemente para convencerlos de que vengan a una reunión como esa a la que asististe tú.

Y todo se desarrolló como tu esperabas y como, por otro lado, era lógico. De cien llamadas solo uno mostró un mínimo interés

El tema no te convencía ni poco ni nada. Entre tus conocidos había empresarios con negocios boyantes, funcionarios con buenos puestos y mejores salarios, etc, que sabías positivamente que no tendrían el más mínimo interés en ir a una reunión como esa, ni en iniciar un negocio de ningún tipo. Pero te dejaste llevar e hiciste lo que te pedía tu amigo.

Y todo se desarrolló como tu esperabas y como, por otro lado, era lógico. De cien llamadas solo uno mostró un mínimo interés. Y descubriste, lo duro y desgastante que es que tus conocidos no solo te digan que no les interesa esa “grandísima oportunidad” que les estabas proponiendo sino que aquellos con los que tenías más confianza, poco menos que te llamaron tonto.

¿Por qué empezaste a desarrollar un negocio bajo unas pautas que ya desde el principio no te parecían lógicas? ¿Por qué no te enteraste bien antes de empezar, como te proponía tu amigo hacer el negocio?.

Ahora que has descubierto que lo que te propone no tiene éxito, y además que has conseguido quedar mal con muchos de tus conocidos, tienes dos posibilidades. Lo más frecuente es que la gente en tu situación abandone y se dedique a renegar del marketing multinivel. Los mas perseverantes, intentan, aunque tarde, aplicar aquello de nunca es tarde si la dicha es buena, y empiezan a aprender a desarrollar su negocio de otra manera, sin desgaste emocional, sin enajenarse las amistades, sin intentar convencer a quien no tiene ningún interés en ser convencido.

Simplemente vamos a hacer una lista de todos tus conocidos y vamos a empezar a llamarlos

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