En la actualidad, el coaching ha alcanzado muchos ámbitos de trabajo. Para logros personales, el coaching ontológico es una excelente experiencia para desafiar creencias que nos limitan y alcanzar nuevos objetivos. Las sesiones individuales de coaching permiten tratar un tema en particular respecto a un objetivo a alcanzar, que en el momento no se está logrando. Con un trabajo de reflexión es posible que se abran nuevas ventanas para mirar el tema desde otras perspectivas. Salir de la zona de confort desde donde interpretamos el mundo, nos permite encontrar nuevos territorios de acción donde es posible alcanzar nuevos objetivos. No se trata de hacer algo diferente para conseguir un resultado distinto, sino de una experiencia de transformación del ser que permite refutar juicios y creencias que limitan nuestro accionar.

En el ámbito de las empresas, el coaching organizacional es una gran formación para empresarios o personal que toma a diario grandes decisiones o implementa nuevas estrategias de trabajo; y necesita coordinar acciones con muchas personas. El coaching empresarial ofrece la posibilidad de trabajar con otras personas las experiencias cotidianas para alcanzar nuevos objetivos nutriendo el proceso con muchos puntos de vista de otros profesionales. Estar abiertos a la escucha de lo que otros pueden aportar, desde su experiencia y desde lo que ellos saben o conocen, permiten un aprendizaje superior respecto a cualquier tipo de tema planteado. Es una gran experiencia que hace posible alcanzar mejores resultados. Compartir, debatir e intercambiar ideas o maneras de mirar un determinado tema ayuda a ampliar la perspectiva y conseguir mejores resultados.