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Los frontones son lugares públicos donde todavía se fuma con bastante impunidad. La apuesta y el puro están bastante asociados en la pelota vasca. En alguna final manista se detectó el doble de materia contaminante que en una discoteca de Barcelona.
Leemos en Diario de Navarra que al frontón Labrit de Pamplona el Departamento de Salud de Navarra le expedienta por incumplir la ley antitabaco. Uno que es habitual al frontón pamplonés comprueba que comparado con otros recintos pelotísticos en el Labrit se fuma bastante menos.
En el reportaje llama la atención del estudio de la Sociedad Vasco Navarra de Prevención del Tabaquismo sobre el consumo de tabaco en frontones de Navarra, País Vasco y Francia (también lo recoge Diario de Noticias). Resumén: en Francia nadie fuma, en Pamplona algunos y en el Ogueta y Atano III en las finales, todo el que puede.
En cuanto al Labrit, el resultado del estudio realizado el 15 de febrero fue una concentración de 0,415 mg/m3. "No hay un nivel de humo tan evidente como en otros frontones", apuntó Zabala. Lejos queda el dato de 1,340 mg/m3 obtenido en el frontón Atano III (San Sebastián) durante la final de parejas de 2009, también en febrero, o la concentración de 1,212 mg/m3 que se registró en el frontón de Mendizorroza (Vitoria) en la final del campeonato de parejas 2008. "Se llega incluso a duplicar la exposición a humo de tabaco respecto a la que registran las discotecas", afirmó.