Si estás pensando en hacer un jabón casero de aloe vera es porque ya sabes de sus maravillosas propiedades para tu piel. Sin embargo, te diré por qué elegir esta receta y no otra.

En principio, esta receta de jabón casero con aloe vera y menta es ideal para principiantes en la elaboración de jabones artesanales. Si es tu caso, ¡no lo dudes!. No hallarás una receta más fácil que esta.

Por otra parte, el resultado es un delicado jabón de sábila que pone los beneficios del aloe vera y la hierbabuena, al servicio de tu piel, ya que ambas hierbas se potencian a favor de tu cutis.

Aún así, te preguntarás por qué hacer un jabón casero de aloe vera, en lugar de optar por uno de los tantos productos comerciales que existen en el mercado.

La respuesta es simple. Entre otras cosas, porque las propiedades del aloe vera aportan excelentes beneficios tanto para la salud y belleza de tu piel como de tu cabello. Y para que estas propiedades se mantengan inalterables es necesario tener cierto control sobre el proceso de fabricación.

Gracias a los principios activos que entran en su composición el jabón de aloe vera casero es:

• hidratante
• cicatrizante
• antiséptico
• fortalecedor del cabello
• anticaída del cabello
• anticaspa
• antiinflamatorio
• regenerador cutáneo
• antiacné

Pues bien, te diré cómo hacer jabon con aloe vera y menta. Para ello vas a necesitar:

• 4 hojas frescas de aloe vera
• abundante cantidad de hojas frescas de menta
• 180 gramos de sosa cáustica
• 1 litro de aceite
• 1 litro de agua (repartido entre el licuado de aloe y la infusión de menta, la proporción de ambos es según tu gusto)
• 1 recipiente
• licuadora

• Corta las hojas de aloe, pela y sólo emplea la pulpa interior.
• Licúa El aloe vera.
• Prepara una infusión con las hojas de menta.
• Coloca en un recipiente plástico, la infusión de menta colada, la sosa cáustica y el licuado de aloe.
• Añade el aceite y bate con batidora manual hasta que espese.
• Vuelca en el molde, alisa la superficie y deja un par de días hasta que cuaje y endurezca.
• Corta.

Esta forma de fabricar jabón casero de aloe vera, no difiere mucho de la que empleaban nuestros abuelos para hacer jabón con sosa en casa.

Sin embargo, si no quieres complicarte y prefieres una alternativa más sencilla, puedes optar por la receta para hacer jabón de aloe vera y glicerina casero que encontrarás en este video. ¡Es superfácil, anímate a probarla!

Ahora que sabes, cómo hacer jabón de aloe vera y menta, puedes aprender a preparar otros tipos de jabón de aloe vera con glicerina. A continuación, encontrarás varias alternativas de recetas.

• De aloe y lavanda. Con aloe vera y lavanda puedes elaborar un jabón no sólo de exquisita fragancia, sino además, muy bueno para regenerar y tonificar tu piel.
• De aloe y rosa mosqueta. Especialmente indicado para piel grasa. Limpia los poros y combate impurezas. Si es tu caso, no dudes en probarlo, ya que se trata de una receta ideal para limpiar el cutis.
• De aloe vera y manzanilla. Un buenísimo suavizante para el cutis, gracias a las propiedades de la manzanilla. Si tu piel está áspera y deslucida, usa este tipo de jabones para devolverle su natural tersura y suavidad.