El austríaco Marcel Hirscher logró su segundo título mundial de esquí alpino al ganar el domingo el supercombinado masculino del Campeonato del Mundo que se disputa en Beaver Creek, Estados Unidos.

De 23 años, Hirscher registró el 31º tiempo más rápido en la primera manga del descenso, pero luego terminó impecable en el slalom, superando al medallista de plata, el noruego Kjetil Jansrud, el primero en el descenso.

El campeón mundial defensor, el estadounidense Ted Ligety, se llevó la medalla de bronce.

"Siempre es increíble", dijo Hirscher, que ganó el oro en el slalom del Campeonato Mundial de Esquí Alpino-2013 en Austria. "Mi plan para este campeonato era lograr una medalla. No importaba el color. Alcancé mi objetivo y todo lo que suceda ahora será super bueno", agregó el campeón.

Para el noruego Jansrud fue la primera medalla después de haber quedado a las puertas del podio (4º) a principios de esta semana en el Super-G.

El supercombinado es un descenso y una carrera de slalom y ambas pruebas tienen lugar el mismo día.

Hirscher fue el primero en salir de la puerta en el slalom y su tiempo fue de 2:36.10 minutos entre 45 corredores.

Partiendo en el puesto número 30º, Jansrud estaba esquiando con un hombro lesionado y terminó con un tiempo total de 2:36.29 minutos, a 19 segundos de Hirscher.

"Fue un día muy especial para mí. Puse mucha voluntad y me las arreglé para esquiar bien", dijo Jansrud.

Ligety, que ganó tanto el supergigante y combinada en el Mundial de 2013, terminó con un crono de 2:36.40 minutos.

El checo Ondrej Bank sufrió cortes en el rostro y una conmoción cerebral en un accidente de alta velocidad cerca de la línea de meta en la prueba de descenso. Bank fue hospitalizado, pero estaba alerta y "respondió a las preguntas de una manera lógica", dijo el portavoz del evento John Dakin.

Bank fue el medallista de bronce hace dos semanas en la Copa del Mundo en la combinado en Kitzbuehel, Austria.

El checo pareció perder su agarre en el esquí cuando antes del salto golpeó la red de seguridad antes de deslizarse colina abajo y, finalmente, cruzar la meta sin sus esquís.