El crecimiento del mercado de la banda ancha en nuestro país durante el año 2009 ha caído a mínimos, pero eso a las operadoras alternativas no parece importarle.

El número de usuarios de banda ancha podría no sumar ni un abonado, pero eso algunas compañías de ADSL no lo notarían.

Los esfuerzos comerciales de las operadoras pasan por hacerse con clientes de las compañías de ADSL rivales, ofreciendo, cada vez, ofertas más agresivas.

Durante el año pasado, hubo dos operadoras que consiguieron un total de medio millón de clientes, Jazztel y Vodafone. En concreto 248.762 y 262.443 clientes respectivamente, gracias a la estrategia que llevan a cabo de captar a los clientes de otras operadoras. La más perjudicada fue Telefónica.

El ex monopolio, ha visto como, paulatinamente, ha aumentado el número de bajas de sus servicios de ADSL, concretamente un total de 792.210, a razón de 66.000 clientes al mes.

Pero Jazztel y Vodafone no son las únicas afortunadas. La operadora francesa, Orange, ha conseguido captar un total de 202.261. Aún habiendo anunciado que entre enero y septimbre había perdido un total de 73.000 clientes de ADSL, Orange ha finalizado el año con nuevas altas. ¿Cómo puede ser? La explicación está en que no son nuevos clientes de banda ancha, son usuarios a los que Orange ofrecía ADSL pero no teléfono, y ahora les está ofreciendo línea.

La forma de medir este trasvase es a través de la portabilidad de la telefonía fija. El cliente que se cambia de operadora y pide mantener su número de teléfono, queda registrado en la entidad encargada de llevar a cabo la gestión.

La guerra en el mercado de la banda ancha ha llegado. ¿Quién será el vencedor en este año 2010?

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