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En Mayo de 2016, en México, el veterano matador Rafael Rodríguez 'El Pana', recibió una brutal cornada que acabó con su vida días más tarde. El español Iván Fandiño perdería la vida, también por una terrible cornada al año siguiente
El desarrollo de estas fatales cogidas fue muy diferente, pero en el instante más preciso de ambas se percibe un error similar por parte de los matadores, parecen tratarse de una falta de sincronización entre el acercamiento del toro y el instante del movimiento del capote. En el caso de Iván Fandiño, a diferencia de 'El Pana', el torero se situó a unos diez o doce metros del toro, desde donde este arrancó; no llevando, por tanto, aquella otra terrible velocidad, en vez de cornearlo y gracias también a cierta reacción de Iván en el último instante, solo consiguió una embestida fallida que descompuso al torero. Iván entonces soltó la tela e inició la escapada hacia las tablas estorbándose un poco con su propio capote, lo cual retrasó la huida en fracciones de segundo, suficientes para que el toro le alcanzara mortalmente.
El torero fue corneado al tropezar con su capote intentando esquivar al toro
Este es uno más de los cientos de casos investigados por el autor y relatados en su último libro: "Programados para morir". Entre los accidentes examinados durante el periodo de estudio encontramos los de Allan Simonsen, Alex Angulo, Ena Kadic, Jackson Wroman, Alex Casademunt y otros.
