¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Ordos escriba una noticia?
Si no cambia la tendencia de voto que anuncian las encuestas, Madrid se convertirá en la capital del fascismo de nuevo cuño, gracias a la abstención de la izquierda y sobre todo gracias a la decidida voluntad de algunos sectores de la izquierda en dividir sus votos
En el año 2015 lo decía Pablo Iglesias Turrión: “hicimos lo contrario a lo que la izquierda hubiera hecho y por eso funcionó”. Pero lo cierto es que no funcionó, y no sólo no funcionó, ha ido de mal en peor.
La derechona se ha crecido, se ha multiplicado, se ha diversificado y se ha envalentonado hasta volver a sus postulados fascistas.
Ha fallado el discurso, han fallado las alianzas, han fallado los dirigentes y ha fallado hasta el color elegido para el partido.
Se ha desmotivado y desmovilizado a los sectores populares con propuestas para tomar los cielos cuando los problemas están a ras de suelo y son tan sencillos como organizarse y estructurar un partido con cuadros dirigentes capaces y competentes, que se dediquen más a organizar los barrios, las fábricas y los profesionales, lejos del postureo y la atención mediática.
Hay que dirigir el foco a los problemas y no a las declaraciones polémicas que desvían la atención de los votantes y les llevan a la confusión.
Hay que sacar a la calle a los pensionistas para que lleven su mensaje a las masas y no a las cadenas de televisión, un dirigente es una persona rodeada de gente, no una persona rodeada de micrófonos y cámaras de TV.
Un dirigente está en los barrios no en los platós de TV, un dirigente es el que escucha a sus votantes y los hace partícipes de sus reivindicaciones, un dirigente no da lecciones a las masas, las escucha, las escucha atentamente y las acompaña en sus exigencias, las acompaña en sus manifestaciones…no las sustituye.
El dirigente no sustituye a las masas, el dirigente acompaña las manifestaciones de las masas poniéndose a la cabeza, no va a remolque de las masas agitando su bandera para salir en la foto.
No hace falta flagelarse ni llevar el cilicio, con rectificar es suficiente
La socialdemocracia ha rectificado infinidad de veces y no ha pasado nada, no hay nada nuevo a la izquierda de la socialdemocracia y por eso mismo sigue siendo la referencia de los demócratas y los liberales progresistas, sin dejar de ser el referente socialista que recuerda al partido de los trabajadores, mejor o peor, guste más o guste menos, llámese Gabilondo, llámese Odón Elorza.
Lo demás, son partidos minoritarios que representan a sectores minoritarios en una sociedad plural y diversa que se ven en la necesidad de pactar con los partidos de referencia.
Y eso es justo lo que va a suceder en Madrid, cuando la derechona de la que hablaba en 2015 Pablo Iglesias Turrión se vea “forzada” a pactar con su ala fascista y dé paso a una coalición de gobierno hasta ahora impensable en Madrid.
Entonces le recordaremos nuevamente su frase: “hicimos lo contrario a lo que la izquierda hubiera hecho y por eso funcionó”.
La izquierda está frente a la derecha, unas veces cerca y otras veces lejos, pero están enfrentadas, así que sólo hay un camino, arrimarse a la izquierda para combatir a la derecha que es lo que siempre ha hecho la izquierda y no lo contrario: Atacar a la izquierda hasta desprestigiarla y presentarse como el salvador vestido de transversalismo, travestido de feminismo, ecologismo… y padre de una nueva clase inexistente.
El infantilismo es la peor enfermedad de la izquierda, sólo comparable con el arribismo y la traición, enfermedades que ha conocido la izquierda a lo largo de su dilatada historia.
Háganse un favor y háganse mayores que ya está bien de hacer el indio jugando a los vaqueros, que lo que se viene encima no es el Séptimo de caballería, lo que se viene encima es el fascismo y eso es algo serio.
Los votos de Podemos, sólo van a servir para restar votos a la izquierda y asegurar la llegada del fascismo a las consejerías de la comunidad de Madrid.
El de la caja de medallitas que se vaya preparando que hay que poner unas cuantas.
@ordosgonzalo
gonzalo alvarez-lago garcia-teixeiro