Hasta un 50 por ciento menos que el año pasado. Es la previsión que ha hecho el secretario provincial de UPA Cuenca, Javier Moya, de la campaña de vendimia que este lunes se generaliza en La Mancha. La estimación de la Consejera de Agricultura, que preveía una merma de poco más del 15 por ciento, ha sido calificada por Moya como "errónea", hecha –dice- desde los despachos o por gente que va al campo de 'picnic'. Moya se ha mostrado muy pesimista en cuanto a la rentabilidad de esta campaña. Reconoce que aunque el precio de la uva ha subido un poco, éste no será suficiente para cubrir el aumento de los costes de producción y la reducción de la cosecha.

Además Moya ha resaltado que supondrá poder contratar a muchos menos trabajadores que en años anteriores. Una situación lamentable, teniendo en cuenta el paro que existe en la región como demuestra, según Moya, el aumento de trabajadores que se han ido este año a la vendimia francesa. Moya ha culpado de esta situación a los políticos que siempre en campaña electoral prometen poner medidas en marcha a favor de los agricultores, como la Ley de Márgenes Comerciales, y luego ceden ante las presiones de los intermediarios.