Es innegable que atravesamos un momento crítico en NUESTRA economía, y no hablo de nuestro país, hablo de nuestra capacidad de reacción. Y muchos me tomareis por loco, pero locura es virtud. Es una obviedad que no lo estamos pasando bien, pero la esperanza es lo último que se pierde.

Siempre he intentado levantar la cabeza en los peores momentos, mostrarme fuerte cuando mas débil estoy, tan solo para que los demás que me rodean levanten su ánimo. Contagiar una sonrisa, un gesto de cariño, a veces una persona que de verdad lo necesita lo valora mas que a nada. El dinero es necesario, si, pero ¿de cuanto dinero estamos hablando?, vivimos en una sociedad encajada, que cuanto mas tiene, mas quiere. Tropezámos dos veces con la misma piedra, y no asumimos nuestro error.

Dime chica, ¿has podido soportar la tentación de hacerte con ese bolso nuevo, que vale el dinero con el que comería una familia durante unos días y que solo usarás, cuánto, dos veces?, no, no has podido. ¿Y tu amigo? Esas gafas, o esa ropa que tanto impresiona a la chica que quieres conquistar solo por el dinero que te has gastado, ¿realmente mereció la pena?, dando una imagen superficial y sencilla, subestimando lo que siempre y por causa desconocida se nos olvida a todos. Tan solo hacía falta un gesto de cariño, o esa sonrisa que propague tranquilidad.

En resumen, ellos son los que están en crisis.