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La tecnología ha traído consigo el olvido de lo que somos, y ha provocado que nos valoremos solamente por lo que tenemos.
La vida se abre camino espontáneamente, porque se crea a sí misma. Por eso todas las especies que hay en la tierra, incluido el ser humano, están conectadas, el llamado ciclo de la vida.
Formamos parte de un mundo natural, por eso tendemos a la naturalidad, lo que ocurre es que nos hemos olvidado. La tecnología ha traído consigo el olvido de lo que somos, y ha provocado que nos valoremos solamente por lo que tenemos.
Esta ha sido la gran mentira, lo que ha hecho que desde hace años nos hayamos convertido en seres dormidos, necesitados de una religión para consolarnos y de otras muchas cosas para suplir las carencias espirituales.
Somos seres, que a pesar de vivir en un mundo físico, orientado al consumo y a las posesiones, hemos sido capaces de tener espiritualidad, y no nos hemos dado cuenta de lo importante que es hasta ahora que nos han dicho que la cosa se pone fea.
Creo que nuestro planeta maravilloso fue creado para nosotros, y que puede tener su propia conciencia, pues si todo es energía y esta está compuesta de átomos, que a su vez se componen de electrones que están huecos, y que simplemente por la manera de vibrar conforman una cosa u otra, la Tierra ha de tener conciencia. Por eso se queja, por eso ocurre todo lo que ocurre, pero porque todo forma parte de una misma cosa...no se como llamarlo, pero me temo que simplemente conciencia. Una conciencia que se expandió creando todo esto que hoy conocemos por mundo terrenal.
Conforme hemos ido degradándonos como seres humanos, la tierra ha ido muriéndose paulatinamente. El desarrollo de algunas naciones solo ha sido posible gracias a la pobreza de las más ricas de espíritu. Un ejemplo clave es el continente africano, y por supuesto Sudamérica, los cuales hemos saqueado sin ningún tipo de escrúpulos, con un solo fin, enriquecernos, pero enriquecernos con banalidades, con cosas que no nos ayudan a crecer, ni despertar, todo lo contrario, solo ha traído guerras y desidia. Quizá hemos tenido que tener esto para querer lo contrario, es la dualidad la que impera en este, nuestro mundo físico. El bien no tiene sentido sin el mal, la riqueza no tiene sentido sin la pobreza, y así podríamos continuar hasta llegar al ying y el yang.
Cuando riegas una planta con cariño crece preciosa, pero cuando la riegas con odio se muere.
Si todos nos dedicáramos a ser, simplemente ser, no haría falta tener normas, ni reglas, porque a nadie se le ocurriría hacer nada incorrecto, ¿sabeis por qué? Porque todos somos uno, y lo que yo te hago a ti en realidad me lo estoy haciendo a mi.
Es cierto que todo está cambiando, es cierto que todo apunta a un desastre, pero es normal, la sociedad en la que vivimos está provocándolo. Sería maravilloso poder concentrar a todas esas personas que viven en otra clave, la del amor, y hacer una nación solo para ellas, en la cual me incluiría, para demostrar que solo así podemos cambiarlo todo, incluidos los desastres naturales, que no son más que un intento del planeta para librarse de aquello que lo tiene mortificado. Cuando riegas una planta con cariño crece preciosa, pero cuando la riegas con odio se muere...es un ejemplo tan sencillo...sin embargo no nos detenemos a pensar en ello.Tendemos a pensar que todo ha de ser como es, y que forma parte de la evolución, pero amigos, esto es involución, no evolución.
La evolución es interior, no exterior. Vivimos en auténticos panales, rodeados de cemento, de ruído por todas partes, de máquinas que emiten sustancias que contaminan, que nos matan, y nos estamos dejando engañar. Porqué no nos revelamos? porque somos pocos y no tenemos fuerza, sin embargo sería la única posibilidad.
Aún así, ya lo estamos cambiando, porque el cambio de conciencia está latente, lo veo por todas partes últimamente, no dejan de llegarme escritos de personas que piensan como yo pidiendo aclaraciones, y eso es porque estamos despertando.
Animo a todas aquellas personas que lean este artículo a que sean los observadores de su propia vida, que hagan ese viaje interior para comprenderla mejor, y a que comiencen a ver el mundo de una manera diferente, porque nada existe en realidad, todo es la proyección que hacemos nosotros a través de nuestros deseos y pensamientos. Porque un solo pensamiento puede cambiar el mundo.
El desarrollo de algunas naciones solo ha sido posible gracias a la pobreza de las más ricas de espíritu.
Hagámoslo pronto!