El obispo de Amberes, que pidió a la Iglesia "respeto" hacia los gays y los divorciados, fue premiado por una asociación de defensa de los derechos de los homosexuales, informaron el domingo los medios belgas.

Un mes antes del sínodo sobre la familia convocado por el papa en octubre, Monseñor Bonny había publicado una progresista carta abierta, pidiendo que la Iglesia reconociera "como buenas y válidas otras formas de vida común fuera del matrimonio clásico".

El religioso dijo a la agencia Belga que no creía merecer una recompensa por hacer un alegato que releva de su "misión y responsabilidad" y que su objetivo era "unir y reconciliar, siguiendo los pasos del papa Francisco".

El obispo, que recibió con cierto embarazo el premio de la asociación Cavaria (la federación de asociaciones flamencas de defensa de los homosexuales), había pedido que retiraran su nombre de la lista de nominados cuando se hizo pública.

El domingo, insistió en que deseaba preservar su independencia frente a todos los colectivos implicados en un "tema particular".