¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Javier Mesa Reig escriba una noticia?
ORACIÓN DEL CONDUCTOR por Antonio DÍAZ TORTAJADA Sacerdote-periodista de la parroquia Santa Maria del Mar de Valencia
De nuevo y con motivo del Gran Premio de Formula 1 en Valencia, el sacedrorte peridista Antonio Diaz Tortajada Sacerdote - Periodista editó la ORACIÓN DEL CONDUCTOR, un curioso y singular rezo para desear y esta presente cerca de Jesus durante la competicion deportivo y acercar a todos los conductores su oracion. A continuacion y gracias a la informacion facilitada por Angel Crespo os mostramos esta maravillosa y curiosa oracion que nos vuelve a sorprender y que dice asi:
Alabado seas mi Señor por el coche de gran cilindrada o modesto utilitario.
Alabado seas mi Señor por el flamante deportivo o camión de transporte.
Alabado seas mi Señor por el último modelo o el "acabado" por los años.
Alabado seas mi Señor por el coche valioso instrumento de una vida más humana.
Cada coche es una cátedra ambulante desde la cual debemos dar, con el ejemplo, lecciones de bondad, de justicia, de amabilidad, de cortesía de perdón y de amor fraterno.
Todos los que se desplazan conmigo o siguen la misma carretera de asfalto confían en mi valor y más aún en mi prudencia. El motor de la maquina en nuestras manos nos recuerda la historia de nuestro corazón.
Ante sus averías a veces me he asustado como aprendiz ante un motor desconocido y he comprendido que no podía repararlo solo: le he desmontado y en la presencia de un hombre de Dios lo he vuelto a componer renovándolo totalmente según el plan original del fabricante.
Que la carretera sea para los que conducimos anillo de amor que hermana pueblos, pista obligada donde otros corren tras una meta. Que la carretera sea propiedad de todos y exclusiva de nadie, donde la ley sea igual para todos y se reclamen los mismos deberes donde dejamos a pedazos una parte preciosa de nuestra vida.
Que nuestra vida ante el motor sea un caminar y nuestro destino ir siempre más allá. Nuestro espíritu siente siempre, Señor, necesidad de recorrer caminos nuevos, que sintamos la urgencia de recorrer tu vida que es camino para llegar hasta el Padre.
Tu eres el objetivo de nuestra ruta premio de nuestras fatigas, vida de nuestro caminar.
Un día seremos abrazados por el Padre como el hijo que vuelve a casa después de años de largas y peligrosas aventuras.
Después recibiremos el premio con música que cantará siempre el triunfo de la llegada, el premio que jamás nos será quitado. Amen.