¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Anunnakienfessolsinaps escriba una noticia?
Después de la fiesta socialista anoche en Valencia arropado por todo el PSPV decide firmar tan solo 24 horas después un pacto antiterrorista que como le recuerdan los suyos, "transpasa las lineas rojas"
Sánchez, secretario general del PSOE ha vuelto a desatar las iras de la militancia, parte de ella integrada en un movimiento de confluencia surgido del desencanto con la línea del ex-asambleísta de Caja Madrid. La noticia del día de la marmota podría parecer repetitiva en condiciones normales, sin embargo nuestro Bill Murray particular ha batido un nuevo record “suicidándose” según las bases por enésima vez.
El veterano de la guerra de Bosnia, rodeado de todo el poder de fantasía del PSPV en Benicalap dio un discurso pidiendo la confluencia de las izquierdas contra la derecha. Ya que el PP a quien teme es al PSOE. 24 horas después ha firmado un pacto de gobierno con Mariano Rajoy contra el Yihadismo. Si ayer presumía de su ADN Socialdemócrata, hoy Sánchez ha firmado un pacto que eleva al máximo la pena al terrorismo, y aunque el pacto no recoja la prisión permanente si que lo recoge la reforma del código penal. Penas de uno a tres años por enaltecimiento del terrorismo, consultar páginas sobre yihadismo, el contacto con organizaciones terroristas, prohibir el entrenamiento paramilitar con una pena de 1 a 8 años por ser entrenado, y por alguna razón poco explicable, el delito de tentativa de atentado, el simple hecho de desear atentar, tendrá una pena de 8 a 15 años según el nuevo pacto.
Si ayer era imprescindible en Valencia el entendimiento de la izquierda, hoy en Madrid lo imprescindible es el acuerdo entre los españoles contra el terrorismo.
Las bases del PSOE se han mostrado descontentas desde el primer momento, una de las voces más críticas del partido, Beatriz Talegon, ha calificado el pacto de “vergüenza” y ha recordado que traspasa las líneas rojas. Otros han recordado desde el mismo partido, que el mismo PP y casi el mismo PSOE votaron a favor de la intervención en Libia y el apoyo a sectores radicales de la Yihad nutriéndoles de armas durante el gobierno de Zapatero, y recriminan que hoy, ese mismo PP con el PSOE habla de los aliados de ayer como los enemigos del mañana.