
Podemos vivir rodeados de gente y, sin embargo, sentirnos solos. La soledad empieza a ser una pandemia en la sociedad actual. Especialmente, entre las personas de avanzada edad que viven en las grandes ciudades. Los abrazos son curativos, son la luz del alma que enciende la autoestima a través del reconocimiento ajeno. ¿Cuál es el poder curativo de los abrazos? Esta es una de las formas de demostrar tus sentimientos:
- Un impulso de fuerza. Seguro que en algún momento has vivido la experiencia de sentirte débil y sin ánimo. Sin embargo, un abrazo de un ser querido te dio ese empuje que estabas necesitando para afrontar la jornada.
- Los abrazos son experiencias. Existen bienes que solo pueden disfrutarse desde el consumismo. Sin embargo, ese no es el caso de la felicidad sintetizada en este gesto. Los abrazos son gratis. Y, además, expresan sinceridad, cariño, esperanza y bondad.
- Abrigan al niño que llevas dentro. Los bebés reciben muchos abrazos por parte de sus padres y abuelos. Con cada abrazo que recibes en tu etapa adulta, vuelves a sentir cómo ese niño interior vuelve a brillar.
- Revisitar el presente. ¿Cuántas veces tu mente está en otro lugar? ¿Con qué frecuencia desconectas del ahora y te dejas arrastrar por la constante planificación de aquello que te queda por hacer? Un abrazo deseado, te hace sentir bien. Por medio de este gesto de lenguaje corporal, reduces tu nivel de vulnerabilidad. Te sientes felizmente arraigado al poder del ahora. Sientes que todo lo demás queda en un segundo plano y solo importa ese instante de un abrazo que, en cierto modo, paraliza el tiempo.
- Abrazar un árbol. ¿Conoces los baños de bosque? No solo puedes abrazar a una persona, también puedes bordear un árbol con tus brazos y sentir el poder curativo de la naturaleza ante ti. Un contacto con la naturaleza que expande tu alma y reduce el estrés.
- Autoabrazo. Cierra los ojos, cruza tus brazos realizando el gesto de abrazarte a ti mismo. Mantén esta posición durante varios minutos. Y sentirás el poder de tu propia compañía. Es decir, no dependas solamente de los gestos de los demás. Puedes regalarte tus abrazos infinitos para ti mismo.
Una de las frases bonitas de amor es esta de George Sand: "El beso es una forma de diálogo". Por tanto, un abrazo también es un modo de comunicar un mensaje sin palabras.