Como buen gallego el líder del principal partido de la oposición cumple a raja tabla el dicho gallego de que no se sabe bien si baja o si sube la escalera. Las medias tintas son la forma esencial de hacer política de don Mariano Rajoy brey, tanto en sus relaciones dentro del partido en Génova 13, como en sus frecuentes concesiones a un cada vez más errático presidente del Gobierno.

En primer lugar, debería poner orden en su propia casa dando un golpe de autoridad dentro del partido, demostrando quién manda y sobre todo demostrando quién tiene el poder de hacer las listas electorales, es decir aplicando la máxima de la real politique de quién se mueve no sale en la foto. Así, el dirigente local o autonómico que se saliera un ápice de la estrategia marcada desde Génova sabría que su carrera política, por lo menos en el corto plazo, estaría acabada.

No puede dedicarse a esperar el desmoronamiento del país para llegar a la Moncloa

Por otro lado, esta la cuestión de la política general en las Cortes Generales, teniendo en cuenta que estamos ante un Gobierno socialista en minoría con casi cinco millones de parados en las calles, don Mariano no puede dedicarse a esperar el desmoronamiento del país para llegar a la Moncloa y hacer labores de reconstrucción; sino que debe de elaborar una estrategia de oposición que deje a las claras ante la opinión pública que hay otra manera de hacer las cosas para sacar a España de la crisis y esa fórmula es la del partido popular, explicando claramente sus principales propuestas en materia económica y no caer más en la trampa socialista del pacto de estado, mandando al rey por delante.

Respondiendo a la pregunta que sirve de titulo a este artículo debo decir que no sé si sube o si baja pero conociendo su forma de actuar desde que fue elegido presidente del PP por la vía digital de Aznar, lo que tengo claro es que será el próximo presidente del Gobierno por incomparecencia del PSOE, y si no al tiempo.

Debería poner orden en su propia casa

Que el Señor nos coja confesados.