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Hace tiempo que llegó un video a mis manos y que al final no publiqué debido a que en esos momentos era más urgente el tratamiento de otras noticias. Pero precisamente ayer me encontré de nuevo con el video publicado en un blog amigo y he considerado oportuno publicarlo y difundirlo para que la gente vea lo que se ha convertido en el comportamiento habitual de gran parte de la inmigración, sobre todo marroquí, tanto aquí como en otros países vecinos.
Seguro que para la mayoría no es una novedad la manera de actuar de grupos de jóvenes marroquíes, que con total impunidad y con una violencia desmedida cuando son descubiertos, se dedican a robar, insultar y molestar a los usuarios de calles y transportes públicos. Si aún es de los que desconoce que estos sucesos se están produciendo y van en aumento, este video ofrece una buena oportunidad para conocer con detalle el modo de actuación de esta gentuza y la cobardía con la que reacciona la gente.
Como todos los lectores habréis comprobado tras la visualización del video, que se produce en un autobús parisino, el grave comportamiento de esta gentuza va desde el ir fumando en un transporte público hasta la más brutal paliza a un joven que intenta no dejarse robar. Por mi parte no veo nada anormal en el comportamiento de esta gentuza, a la que así tengo catalogada aunque no sea políticamente correcto el decirlo, pero lo que realmente me preocupa y me indigna del video, además de la agresión, es el comportamiento cobarde de los pasajeros del autobús, y más concretamente del conductor del mismo, que es incapaz de socorrer al agredido incluso cuando los cobardes moritos han huido a la carrera.
Precisamente de este tipo de comportamientos es de lo que se aprovechan los cobardes que se unen en grupos para ejercer su violencia y para efectuar los robos, conocedores que una sociedad cobarde e inhumana apartará la vista hacia otro lado para que cometan sus delitos con total impunidad.
Pero en Francia la cosa está cambiando y ha surgido un "movimiento Anti-gentuza", hartos de la pasividad de las autoridades ante los abusos de unas minorías y de tener que soportar episodios como los que hemos observado en el video y que aquí en España también se dan a diario en las grandes ciudades principalmente.
Evidentemente la prensa y otros medios han corrido a calificar a este movimiento de xenófobo, extrema derecha, y el resto de calificativos que se aplican a todo aquel que no está dispuesto a ser pisoteado por nadie, especialmente cuando los que pisotean son de fuera.
Está claro que el Estado y las autoridades tienen la responsabilidad de protegernos de sucesos como el que hemos presenciado, y por supuesto legislar para que este tipo de comportamientos no resulten gratuitos. Intentar convertir en "delincuentes, fascistas o xenófobos" a los ciudadanos que hartos de estas situaciones se unen para defenderse de los verdaderos delincuentes e insociables, es un acto de cinismo que cada día cuela menos en la sociedad.
Quede claro que la gentuza la hay en todos los ámbitos sociales y en todas las razas, no por ello podemos negar que actualmente este tipo de comportamiento o practica es más frecuente en ciertos grupos de inmigrantes, y que es igual de legitimo defenderse de gentuza blanca, que de gentuza de otro color, procedencia o religión sin que por ello tengas que ser xenófobo, fascista etc.
Bienvenido sea todo aquello que termine con la impunidad de ciertos grupos, impunidad a la que nuestros gobernantes han sido incapaces de poner remedio, ya sea por incapacidad o por ser políticamente correctos. Deben saber los gobernantes que ellos son los responsables junto a esta gentuza de que la gente explote de esta manera.