Parece ser, que la Democracia está por encima de todas las consideraciones de la vida. O dicho de otra forma; todo, absolutamente todo: las razones, las reflexiones y los motivos personales, deben estar subordinados a Ella. Pero lo que jamás llegué a creer, que estuviera por encima de las leyes, de la Constitución, y de la Declaración Universal de los Derechos humanos.

Así se comprenden ciertas actitudes que concurren en el devenir diario de la sociedad española.

La Declaración Universal de los Derechos humanos hablan de Derechos.. derechos... derechos.... Pero no habla de carencias. Y sin embargo, la cruda realidad, es que en la Democracia Española, millones de personas tienen tantas carencias personales, que rayan en la indigencia.

Un célebre ex alcalde de una localidad Malagueña, ex presidiario y encausado por múltiples casos de corrupción, ha sido invitado a que de una conferencia sobre la putrefacción política en una Universidad. Afortunadamente se ha anulado.

Otro célebre delincuente, se dedica (o se ha dedicado) a dar clases de “pillería” a la Guardia Civil, como si éstos no tuvieran los medios suficientes para enterarse de cómo actúan los pillos.

Un afamado bailarín, que se permitió la licencia de conducir por las calles de Sevilla, un coche de gran cilindrada, sin carné ni seguro, matando a una persona; le pagan 155.000 € por contar sus experiencias en una tele privada.

Pero lo más trágico y que dan ganas de vomitar a las personas de bien, que a los asesinos de Marta del Castillo y la pequeña Mari Luz, les pagarán también millones...

Y “El Dioni” el que se apropió indebidamente (no digo robó, no sea que alguien me denuncie por injurias), después de dilapidar esa fortuna entres rameras, samba y wiskicitos, hoy es un célebre escritor por lo que le pagan millones por contar sus correrías.

Pero lo más trágico y que dan ganas de vomitar a las personas de bien, que a los asesinos de Marta del Castillo y la pequeña Mari Luz, les pagarán también millones cualquier medio privado, por contar sus crímenes cuando dentro de unos años (por no decir meses) hayan pagado sus crímenes con la sociedad.

Por lo visto si, todo vale para la Señora Democracia Española. ¡Bueno no! Todo no vale. Ser sospechoso de Franquista es un delito “contra democracia”. Federico Jiménez Losantos o mismamente un servidor, somos los “verdaderos delincuentes” de esta sociedad que admite lo absurdo, las chirigotas políticas, los corruptos, los terroristas, los enemigos de España, y todo tipo de delincuencia como consustancial a la Democracia.

Ser “facha”, es el mayor delito que se puede cometer en esta Democracia. Y lo peor: que nadie te paga unos milloncetes por contar tus experiencias. Eso de la Patria, el honor, la decencia y la dignidad no le interesan a “los demócratas”.

La Declaración Universal de los Derechos humanos hablan de Derechos.. derechos... derechos.... Pero no habla de carencias....