Decía Franco que dejaba todo atado y bien atado; al poco tiempo todo cambió. Muchas promesas de Feijoo y ninguna cumplida; la historia es para aprender de ella, para evitar que se repitan los mismos errores, no para cometer mas. El que hace tiempo fue un chaval de los campamentos de las Juventudes Nacional Sindicalistas, con pantalón corto; intenta resucitar la grandeza del imperio conquistando una esquina de España y haciendo realidad aquel sueño del viejo dictador.

Prometió mas justicia, mejor gobierno, austeridad, etc. ¿En qué quedaron las promesas?

Los terneros iban subir de precio, arreglaría el problema de la leche, disminuiría el desempleo, no habría mas EREs, no habría revanchismo, habría austeridad en el gasto público.

La realidad es bastante distinta: los ganaderos cabreados, muy cabreados: los terneros no suben de precio, la leche regalada, las fábricas de leche cierran, y los tractores que son máquinas para el campo invaden las ciudades y obstaculizan el tráfico urbano. La provincia de Lugo es la que más sabe de esto.

La austeridad en el gasto iba ser esencial, créase, de facto, cinco provincias y aumentan los cargos políticos, se anulan contratos con la correspondiente indemnización a cargo de los contribuyentes

El metal arde en Pontevedra y no por las hogueras del San Juan, y el textil en A Coruña, menos mal que Baltar mantiene la provincia controlada.

Los EREs en las empresas privadas se incrementaron este año en un cuatrocientos por cien. En el sector público el ERE es permanente: los funcionarios que colaboraron con el anterior gobierno sin ningún cargo político son cesados: jefes de sección, habilitados, secretarias, simples conductores que están cobrando plus de disponibilidad (unos 6000 € al año), son sustituidos por otros que les prometieron este plus, mientras que los que lo cobran los tienen cruzados de brazos en los despachos.

La austeridad en el gasto iba ser esencial, créase, de facto, en la administración periférica cinco provincias y aumentan los cargos políticos, se anulan contratos con la correspondiente indemnización a cargo de los contribuyentes. Se contratan asistencias técnicas que fueron indemnizadas por el anterior gobierno, será para que dentro de unos años si hay otro cambio de gobierno los tengan que indemnizar de nuevo. Todo esto lo pagará el de siempre: el ciudadano.

Paga pagar todo emiten deuda pública: 200 millones de euros. Un gobierno que siga una elemental norma de buen endeudamiento no emite deuda si no es para inversiones, nunca para gastos corrientes, fiestas, subvenciones, gaiteros, cláusulas de penalización de contratos anulados, etc., etc. ¡Esto lo tendrán que pagar futuras generaciones!

El metal arde en Pontevedra, el textil en A coruña, los tractores invaden Lugo