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Con nuestro vehículo no queremos hacer “trucos” porque la “broma” podría ser en un momento muy inoportuno y los costos muy altos, por lo que es mejor mantener el “trato” de tenerlo en buen estado, revisado y consentido
Nos acercamos ya a la recta final del año y vienen festividades que, como sociedad, nos gusta compartir, como el Halloween o “noche de brujas”, en donde la fiesta es en las calles, con adultos y niños disfrazados de lo que se les ocurra, y la tradicional pedida de dulces por parte de los pequeños, con la cantaleta de “truco o trato”, ya que si no hay dulces puede haber alguna broma en consecuencia.
Con nuestro vehículo no queremos hacer “trucos” porque la “broma” podría ser en un momento muy inoportuno y los costos muy altos, por lo que es mejor mantener el “trato” de tenerlo en buen estado, revisado y consentido para que no tengamos consecuencias desagradables. Aquí les dejamos esta guía de lo que hay que revisar periódicamente:
1. Revisión de refrigerante — Esto en realidad es muy sencillo, pero hay que hacerlo periódicamente para evitar sorpresas, el nivel del refrigerante de enfriamiento (radiador) debe estar a su nivel, si no lo está hay que agregarle simplemente agua o una mezcla de agua con líquido anticongelante, que es lo mejor si le hace falta.
2. Revisión de aceite — Lo segundo es el nivel del aceite del motor, debe hacerse luego de que ha estado parado y nivelado por un par de horas para que haya escurrido al depósito y la medición sea real, si le hace falta hay que agregar un poco del mismo tipo del que tiene ni que supere el nivel máximo; también revisar que no esté quemado, eso quiere decir que hay que cambiarlo. Si constantemente el nivel baja significa que el motor está consumiendo el aceite y hay que llevarlo y reportarlo con su mecánico de confianza para que revise la causa.
3. Revisión de cables y mangueras — A simple vista se puede apreciar que todo esté en orden, que no haya cables sin recubierta, fuera de lugar o mal conectados, para evitar posibles fallas. También las mangueras y que no haya goteos, ya sea de refrigerante o de algún aceite, si es el caso hay que revisar y cambiar la manguera con el problema cuanto antes.
4. Revisión de soportes — El motor se apoya en unos soportes que llevan unas gomas para absorber las vibraciones para que no se transmitan al resto del vehículo, obviamente con el tiempo se desgastan y hay que reemplazarlos. Esta revisión la puede hacer su mecánico de confianza con mucha rapidez cuando vaya a algún servicio para verificar el desgaste.
5. Lavado del motor — Normalmente cuando se lleva a servicio uno de los puntos es la limpieza exterior del motor, con algún detergente y agua a presión se puede limpiar bien. Pero hay que tener precaución, algunos motores no deben lavarse así porque el agua puede mojar los cables y bujías, por lo que debe hacerse simplemente con productos químicos que disuelvan la grasa y suciedad exterior sin causar problemas con los sistemas del motor.
6. Limpieza del sistema de inyección — Esto se logra utilizando regularmente algún tratamiento de limpieza de inyectores que se agrega al combustible al cargarlo, el cual disuelve la suciedad en los conductos y en los inyectores, manteniendo los patrones de rociado para una óptima combustión y eficiencia en consumo. Además del Limpiador de Inyectores, Sea Foam ofrece la opción de utilizar el Tratamiento Multiusos para motores a través del tanque de combustible, realiza una limpieza mayor a conductos e inyectores, estabiliza el combustible y limpia la cámara de combustión y válvulas de admisión para prevenir formación de depósitos que impidan un funcionamiento óptimo.
7. Limpieza interior del motor — Utilizando el Tratamiento Multiusos o el Tratamiento Multiusos para alto kilometraje, en caso de vehículos con más de 120, 000 km, directamente en el aceite del motor, se mantiene libre de residuos y barnices que puedan obstruir el paso del aceite para lubricación, causando un mayor desgaste del motor en su funcionamiento. Utilizándolo en cada cambio de aceite se mantiene el motor libre de residuos internos y no causa ningún efecto en el aceite, puede utilizarse con aceites minerales o sintéticos sin ningún problema.
Siguiendo estos sencillos pasos de manera regular, podemos estar seguros de que el motor de nuestro vehículo se mantendrá siempre en excelente estado, listo para trabajar en todo momento, con la confianza en que la probabilidad de tener algún problema será mínima, y no interferirá en nuestros compromisos de trabajo o en los paseos o vacaciones con la familia y amigos.