Pero respecto a las artes adivinatorias en estos tiempos, afortunadamente existe una curiosidad y por ello un acercamiento de respeto y admiración hacia los mejores lectores del tarot.

Esta comprensión y acercamiento al mundo de la videncia y el tarot puede evitar muchos errores en las personas que, bien por el ritmo de vida que se suele llevar, bien por temor a tomar decisiones, en ocasiones se suele plantear la duda de hacia dónde nos dirigimos y si es acertado o no lo que a priori queremos hacer, y que la toma de decisiones inseguras no cabe duda de que repercuten fatalmente en el futuro de la vida de muchas personas. En estas situaciones de duda el tarot y la videncia son excelentes conocedores de los senderos del ser humano. Sabe su complejidad y sus encrucijadas, su delicadeza y sus atajos. Es imprescindible elegir con seguridad, para comprobar que se nos está hablando desde la revelación de los hechos esenciales, las peripecias, las angustias, las esperanzas, las ilusiones que nos suscitan diversas cosas de nuestra vida, desde el nacimiento hasta los albores de nuestros días. El tarot y la videncia realizados desde la más absoluta de las responsabilidades, nos llevarán a sentir que la vida nos lo da todo pero, también nos lo puede arrebatar.

El tarot es un mundo encantador en el que galopan los acontecimientos que surgen de nuestro propio destino implicándose en la apertura hacia el mundo que nos ha tocado vivir, intentando no quebrar el encanto, haciendo que trasciendan los límites de quienes se muestran escépticos, por la densidad de sus contenidos y el alto espíritu de altruismo que desde tiempos remotos vienen haciendo las personas dotadas para acariciar primero las cartas del Tarot, y transmitiendo luego sus mensajes con el único fin de hacer de nuestra experiencia humana una estancia certera y feliz.

Berta de la Torre

www.tarotdelapasion.com