Si en categoria masculina el At Barceloneta ha sido el grán exponente de nuestro waterpolo, como lo fueron en el pasado Montjuic,   Catalunya y Barcelona, en mujeres ha sido el club vallesano quien ha brillado en el continente con cinco títulos, uno menos que el Orizzonte italiano, maximo vencedor de la competición. Las vallesanas, además, exhiben dos subcampeonatos en sus vitrinas.

Pero, ahora, tras el parénteis maléfico de 2020, cuatro equipos femeninos, (Terrassa por primera vez) Mediterrani, Mataró y Sabadell, afrontan la eliminatoria de la fase de calificación.

Oporto, Roma, Atenas  y Berlin serán las sedes en las que los equipos españoles deberán dirimir los partidos de una primera ronda, no excesivamente compleja, en la que se clasifican tres formaciones para la siguiente fase.

En Oporto el Astralpool Sabadell, jugara contra el Pacense, Orizzonte, Ethnikos y Kosice, en Berlin el Mataró, se enfrentara al Plebiscito Padova, Vouhliameni, BVSC Zuglo, Spandau y Olimpique de Niza. En Atenas el Terrassa competirá con el Asa Tel Aviv, Verona, Glyfada y, D Uraloohka, y en Roma el Mediterrani, se medirá con  con Telekom, Lille, Sis Roma, Sirens Malta y Tettero holandés.

Un auténtico reto para nuestro waterpolo que sueña en estar bien representado en la siguiente ronda, con claras aspiraciones de llegar a la fase final y seguir haciendo Historia, en mayúscula.

Es en esta competición donde se comprueba el buen trabajo de los clubes, del que después se nutre la Seleccion Nacional. Precisamente ahora, ante diversos retos económicos han sido los clubes los que han puesto el grito de alarma, ya que para sostener la alta competición necesitan mas ayudas externas, que de no llegar podrían comprometer el futuro de estas formaciones deportivas.

(Foto una de las formaciones historicas del CN Sabadell en una de las ultmas competiciones nacionales.)